Novedades editoriales: «Invierno en los alpes. Una novela internacional» de Zofia Nałkowska
Invierno de 1925, en una residencia de los Alpes suizos, se da cita un grupo heterogéneo de huéspedes venidos de todos los rincones de Europa. Ellos, al igual que las chovas que sobrevuelan los cielos de ese lugar idílico próximo al lago Lemán —y que dan nombre a la edición polaca de este clásico (Choucas, powieść internacjonalna)— llegan buscando la paz que han perdido en sus lugares de origen. Han pasado seis años desde el final de la Gran Guerra y las heridas del conflicto están muy presentes en las conversaciones diarias. Todos ellos forman una curiosa réplica en miniatura de la Sociedad de Naciones: rusos que han dejado de serlo o que huyen de la revolución bolchevique, franceses que sueñan con perpetuar un imperio que comienza a desmoronarse, una pareja de británicos que no han logrado asimilar la pérdida de Irlanda, algún alemán detestado por todos que no ha podido superar el trauma de la derrota, armenios que han sufrido uno de los primeros genocidios de la historia, un judío rumano que encarna un drama que ya se palpa en el ambiente y exóticos españoles (entre ellos, un caballero chapado a la antigua siempre dispuesto a defender su honor y morir por su rey). El invierno pasa, los prados verdean y los huéspedes, como las chovas, se van despidiendo de la residencia. Entre tanto, algunas parejas se han roto y se han descifrado algunos enigmas, pero las grandes cuestiones, que planean sobre una Europa nuevamente al borde de la guerra, siguen sin respuesta. Basada en la estancia de la autora en un sanatorio suizo y narrada con una voz muy personal, esta novela ofrece claves para comprender los desgarros que vivió la sociedad y la cultura europeas entre las dos grandes guerras.
Zofia Nałkowska (1884-1954) es una de las principales figuras de la literatura polaca de la primera mitad del siglo XX. Nacida en Varsovia en el seno de una familia de intelectuales socialistas, en su salón literario se dieron cita los escritores más destacados de la vanguardia polaca. Novelista, dramaturga y ensayista, sus primeras obras se inscriben en el movimiento cultural Joven Polonia. Una vez consagrada como escritora, apoyó a jóvenes autores como Witold Gombrowicz y Bruno Schulz, que llegarían a ser después, al igual que su mentora, clásicos de la literatura europea. Perteneció al PEN Club, organización de la que llegó a ser vicepresidenta, y se convirtió en la primera mujer que ingresó en la Academia Polaca de Literatura en 1933. Fue también una de las promotoras de la creación de la Asociación de Escritores Polacos en 1920. Intelectual comprometida, durante la II República Polaca (1918-1939) unió su voz a la de quienes protestaban contra la represión de los movimientos de izquierdas y de los derechos de las minorías étnicas. Después de la II Guerra Mundial, entre los años 1947 y 1952, ocupó un escaño en el Parlamento polaco. También formó parte de la Comisión de Investigación de los Crímenes Hitlerianos, experiencia que plasmó en su libro Medallones (publicado en España por Minúscula). Comprometida también con la causa feminista, pronunció en 1907 una famosa conferencia en la que exigía la plena libertad sexual de la mujer. Su primer libro, publicado con 26 años, se tituló precisamente Kobiety (Mujeres). Entre sus obras, se puede destacar Romans Teresy Hennert (El romance de Teresa Hennert), Niedobra miłość (Mal amor), Granica (Frontera). Su prosa pasó por diferentes etapas como el modernismo, el realismo, la novela psicológica y el reportaje. También tuvo éxito como dramaturga con obras como Dom Kobiet (La casa de las mujeres) y Dzień jego powrotu (El día de su regreso). Considerada también una gran diarista, reflejó en sus cuadernos, durante más de medio siglo, su visión de la cultura y la historia de su país.